Sinopsis:
Nostalgia de la Luz es un film
sobre la distancia entre el cielo y la tierra, entre la luz del cosmos y los
seres humanos y las misteriosas idas y vueltas que se crean entre ellos. En
Chile, a tres mil metros de altura, los astrónomos venidos de todo el mundo se
reúnen en el desierto de Atacama para observar las estrellas. Aquí, la
transparencia del cielo permite ver hasta los confines del universo. Abajo, la
sequedad del suelo preserva los restos humanos intactos para siempre: momias,
exploradores, mineros, indígenas y osamentas de los prisioneros políticos de la
dictadura. Mientras los astrónomos buscan la vida extra terrestre, un grupo de
mujeres remueve las piedras: busca a sus familiares.
Del Director y el Documental:
Patricio Guzmán, es uno de
los realizadores más importante e influyentes de Chile, con una extensa
filmografía que lo han puesto como un
relevante documentalista en la escena internacional. Uno de sus trabajos más emblemáticos
es “La Batalla de Chile”, un documento
fundamental en la historia de Chile,
como lo son también “Chile, memoria obstinada”, “Salvador Allende”. Sin duda
por estos y otros trabajo a Patricio Guzmán se le considera un director político
y “Nostalgias de la Luz no escapa a este rotulo, ya que dentro de sus discurso
del pasado y la trascendencias llega a postular la necesidad del humano por
mirar su pasado para construir un futuro, esa misma mira la cual debemos tener
los chilenos de los sucesos que marcaron a la nación y es necesario meditar y
reflexionar en ello.
Hablar de Nostalgias de la Luz es hablar de lo trascendental, de aquello que como humanos nos inquieta en lo más profundo, pero rara vez somos capaces de meditar, aún más cuando aquello ha fracturado muchas vidas.
tal vez se hace tedioso, se hace lento ver Nostalgias de la luz, pero creo que es parte del discurso de Guzmán. Aquella lentitud nos ayuda a meditar en todo, en lo que vemos, lo que escuchamos, es pensar y sobre todo cuando parte del discursos es hablar de aquellos que fueron silenciados por creer en algo diferente, de aquello que decidieron nadar contra la corriente.
y la imagen y el sonido se unen para entregarnos una interesante y sobrecogedora obra cinematográfica.
Texto a continuación: www.eldinamo.cl
El “húmedo” planeta Tierra, visto desde el espacio, aparece como una
gigantesca esfera azul. Pero se advierte una mancha de color marrón: es el
desierto de Atacama, que – junto con la luz – es el protagonista de este
documental.
Ese rincón del globo terráqueo es el más árido y seco del mundo. De
allí que su cielo es de una pureza inigualable, al punto que ha sido escogido
por los astrónomos para instalar los telescopios más poderosos del mundo. Son
los que aparecen en la película, como centinelas de los misterios del cosmos.
Mientras tanto, otras personas buscan aclarar otros misterios en la
tierra seca y estéril. Los arqueólogos van tras los rastros de los pueblos
prehispánicos, con su caminos y petroglifos. Las mujeres que perdieron a un ser
querido, en cambio, buscan los restos de los “desaparecidos”, enterrados
clandestinamente y luego exhumados para arrojarlos al mar o en otro sitio.
Pero el desierto es también historia del siglo pasado, primero con las
salitreras y los cementerios; después con el Campo de Concentración de
Chacabuco, ubicado a 100 kilómetros de Antofagasta. Como tantos otros tópicos del
filme, constituye dos caras de una misma moneda: la vida de los mineros era muy
similar a la de los prisioneros políticos. Sólo que estos últimos se
organizaron para estudiar astronomía en las largas noches de cautiverio. Hasta
que los carceleros prohibieron las reuniones, porque “estaban estudiando el
cielo para fugarse guiándose por las estrellas”.
Esa luz, que viene desde un pasado muy remoto, es todo un símbolo de
nuestra caducidad y de nuestra lábil permanencia en el tiempo. Porque el
tiempo, contrariamente a los que sostienen que sólo el presente existe, para
Guzmán es sólo pasado. Los sonidos y la luz requieren de un tiempo para llegar
a nosotros. Por lo tanto, toda la información que recibimos ya es pasado. Y ese
pasado es el que el hombre trata de conocer por medio de la luz, que hace
desaparecer las tinieblas. Hay que pensar que la obscuridad es el estado normal
de la materia inerte, pero ésta cobra vida cuando es tocada por la luz.
Fotografía y música impecables hacen de esta película una creación
estética de altísimo nivel, que despertará inquietudes filosóficas en la
mayoría de los espectadores. El resto disfrutará de la belleza de nuestro
maltratado hogar planetario.
DIRECTOR: Patricio Guzmán.
GUIÓN: Patricio Guzmán.
CASA PRODUCTORA: Atacama Producciones - Blinker
Filmproduktion & WDR (Alemania) - Cronomedia
PRODUCCION EJECUTIVA: Verónica Rosselot.
PRODUCCION: Meike Martens, Cristóbal Vicente.
ASISTENTE DE DIRECCION: Cristóbal Vicente.
DIRECTOR DE FOTOGRAFIA:
Katell Djian.
MONTAJE: Patricio Guzmán, Emmanuelle Joly.
MUSICA: José Miguel Tobar, Miguel Miranda.
SONIDO: Freddy González.
RELATO O VOZ EN OFF: Patricio Guzmán.
No hay comentarios:
Publicar un comentario